Aunque Casanare tenga regalìas, estamos lejos de lograr que todos los hogares vivan en condiciones dignas.
Miguel Vargas es un ciudadano recetoreño que por un accidente ocurrido años atrás, quedó a merced de los buenos corazones que le quieran ayudar. Con todo, lo más grave para él en estos momentos es la adecuación de su propia casita, a donde pueda llegar y descansar tranquilo después de buscar el pan cada día. Ya cuenta con el terreno y el techo, pero faltan los pisos y el encerrado. Ante esta situación, Asocomunal Recetor decidió convocar voluntarios para cumplir con este propósito. No fue para menos: el pasado 6 de junio nos dimos cita varios líderes comunales y 2 concejales del municipio. Aunque no terminamos la tarea por falta de material, la jornada fue significativa.
Invitamos desde ya a quienes quieran participar en la siguiente jornada, en la cual aspiramos dejar terminados los pisos y el encerramiento en madera.
Gracias por su aporte. Unidos logramos todo lo que nos propongamos. Estamos en capacidad de dar soluciones a problemas apremiantes sin tanto ruido, sin interés político. Y ser solidarios es un principio comunal ineludible. "Sigamos haciendo el bien sin mirar a quien".
Evidencias del espíritu solidario.
El juez de paz Elver Silva también "se puso las botas" en pro de la causa.
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